miércoles, 26 de marzo de 2014

No todo gira en torno al EIR

Aquí estoy un día más con otra entrada. Esta vez os voy a hablar de lo que supuso el EIR para mí a nivel emocional. Aunque el resultado ha merecido la pena con creces, quiero aconsejaros por experiencia que no se convierta en lo ÚNICO.

Un año de tantas y tantas horas dedicadas a los libros te acaban pasando factura. La parte buena es que lo he sacado, y diréis, ¿hay alguna mala? pues sí, me arrepiento de que se convirtiera en el centro de mis pensamientos, de que supusiera una obsesión para mí el hecho de aprobar el examen.

Lo he logrado y estoy muy feliz vale, pero he de reconocer que me cambió el carácter. Sobre todo en los últimos meses. Sobre todo en ENERO. No había quien me tosiera. Estaba tan cansada mentalmente que a nada me echaba a llorar o me ponía de muy mal humor desde que me levantaba hasta que me acostaba. Estaba tan harta en todos los sentidos que lo pagaba con los de mí alrededor. Yo se que han tenido mucha paciencia conmigo y se lo agradezco una y otra vez. Pienso que en una oposición, el que lo pasa mal es el opositor si, estamos de acuerdo, pero hay que destacar también la figura de la familia, la pareja…que se pueden convertir en tus mejores aliados, que te pueden animar cuando ya no crees en nada ni en nadie y muchas veces pagan las consecuencias de nuestro estudio.

Me levantaba siempre con el mismo pensamiento: un día menos a tachar en el calendario. Desayunaba, me vestía, cogía mis bártulos y me iba a la biblioteca la cual se convirtió en mi segunda casa durante mucho tiempo. Preparaba todo y ale a abrir un día más el manual que tocase. He de decir que por la mañana es cuando realmente rendía de verdad… las tardes de estudio para mi eran lo peor de lo peor, me entraba mucha modorra. Llegaba a casa y no os creáis que desconectaba no, me ponía a buscar dudas o a terminar de hacer preguntas tipo test si andaba pillada. Y el día no terminaba ahí. ¿Cuántas noches habré soñado con el EIR? ¡Miles! Con el día del examen, con las clases, con el momento de introducir el DNI en el pc, pero, sobre todo, con el día de la elección de plazas! Supongo que os irá pasando también a vosotros. Y piensas, normal, todo el día pensando en lo mismo como no vas a soñar con ello…

Lo que os quiero decir es que como veis, el EIR puede ser un arma de doble filo. Yo soy la primera que os digo que id a por ello, que luchéis con todas vuestras fuerzas pero con un límite. Porque os aseguro que ahora que recién habéis empezado no lo notaréis pero cuando llevéis meses y meses sí. Estamos de acuerdo en que hay que emplear horas, pero intentad que no os afecte en lo posible en lo personal. Sacad ratos de donde sea para disfrutar, para evadiros. Porque si no sentiréis  que habéis perdido un año de vuestra vida. Y ya no me refiero a suspender, sino la amarga sensación de que te has perdido muchas cosas. Tomate tu tiempo para desayunar mientras escuchas tu programa favorito de radio, cierra el manual por la tarde pero ciérralo de verdad, y arréglate para ver a tu pareja o a tomar algo con tus amigos, disfruta de un baño relajante con espumita una vez a la semana, reserva el miércoles por la noche para ver tu serie favorita, vete media hora antes a la cama para leer… esas pequeñeces, esos detalles, que os harán relajaros, que os harán no pensar en el EIR las 24 horas del día. No creáis que yo hacía todo esto (me lo he inventado) sino es lo que por ejemplo me hubiera gustado hacer y no tuve la valentía porque si no creía, pensaba, que iba a suspender. ¡¡ERROR!!

Si estás todo el día durante un mes y otro, y otro… con el run run en la cabeza, EIR EIR EIR EIR, te deprimes y eso se transmite a tu alrededor. No vas a rendir lo suficiente porque la obsesión por aprobar destacará más que otra cosa y además, los días se van a hacer mucho más lentos de lo que en realidad son. DESCONECTAD. Por vuestro coco. Por vuestra salud.

¿Sabéis lo que me vino genial a mí para desenchufar? Salir a correr. Empecé en primavera y lo que hacía era ir a mediodía, al venir de la biblioteca. Yo he sido una persona sedentaria gran parte de mi vida y estar todo el día sentada en una silla me llamaba para empezar a hacerlo. Al fin y al cabo, a mí siempre me han gustado los retos y esto era uno más. Lo que no imaginaba es que me iba a venir tan sumamente bien. Mientras corría, me sumergía en mis pensamientos. Era el momento del día dedicado enteramente para mí. Me ponía en contacto con la naturaleza para desconectar, para airear mi cuerpo y mis ideas. Y la sensación era tan buena… me encontraba mucho más feliz, más plena, y menos cansada que cuando no lo hacía. Me proporcionaba la paz que necesitaba y a la vez siempre imaginaba que eso mismo estaba haciendo con el EIR. Que estaba recorriendo un camino que me conduciría a la meta. Al principio de correr, como buena novata, me metía buenas panzadas, y pensaba que por ir más deprisa, llegaría antes. Simplemente no llegaba. Simplemente, terminaba exhausta. Entonces, me di cuenta de que había que llevar un ritmo ligero, de que se iba a hacer pesado, aburrido incluso, pero que cuando llegara iba a ser muy gratificante e iba a estar muy orgullosa de mi esfuerzo. ¿Os suena? Hacía siempre esa comparación de manera inconsciente. Al fin y al cabo, así es, si lo pensáis bien. En el camino a veces había piedras, piedras que te hacían tropezarte e incluso caer, pero no me quedaba ahí lamentándome sino que continuaba. El camino parecía no tener fin, alzaba la vista y no se veía el final, sino más y más camino, pero yo sé que llegaría, confiaba en mí. Tenía que tener paciencia. Paciencia. Paciencia. Cuantas veces me repetía esa palabra. Y yo la tenía. ¡Qué iba a hacer! Y de repente, ahí estaba. El final que me había marcado. Lo había conseguido, había llegado y me sentía tan feliz…



Aunque un año de estudio se os puede parecer muy pesado, a toro pasado, deciros que se me ha pasado volando. Parece mentira pero se me ha quedado esa sensación. Por ello, no seáis tontos y aprovechad, dad todo de vosotros en cuanto al estudio y no dejéis de dar tampoco  frente al resto de cosas. Esto hará que sea más llevadero.

Cuando me hice el blog tenía claro que ese camino que para mí había sido tan importante, tenía que verse reflejado de alguna manera, por eso puse este fondo. Es un símbolo para mí que aunque os pueda parecer una tontería, ha significado mucho en mi etapa EIRestudiante, porque en medio de esa pesadumbre de un día y otro de estudio, me refugié en correr para buscar la felicidad que no tenía la gran parte del tiempo.

A mí me ayudó eso pero podéis tener otros hobbies u otros momentos de desconexión… comentaros que a medida que se acercaba la fecha, me dio por buscar libros de motivación, mi cuerpo me lo pedía. Me recomendaron ‘’el monje que vendió su ferrari’’ y la verdad es que me gustó mucho. De todas maneras, en google vienen mil.

Por favor, no dejéis de reír, de soñar, pero no con el examen en sí sino con cosas bonitas (con el primer día de residente en aquel hospital que ansiáis, por ejemplo) sed vosotros mismos y tratad de no cambiar, de que el examen no se convierta en una obsesión para vosotros, de que no os afecte más que lo justo. La vida es muy corta para desaprovecharla, no os olvidéis de que se pasa muy rápido y al fin y al cabo es eso, un examen. Una pequeña pieza del gran puzzle de vuestra vida… dentro de unos años lo veréis así…

Os dejó con varias frases del libro que me ayudaron, espero que a vosotros también os gusten. Pasad una semana estupenda!!

V

‘’Cuando te inspira un objetivo importante, un proyecto extraordinario, todos tus pensamientos rompen sus ataduras; tu mente supera los límites, tu conciencia se expande en todas direcciones y tú te ves en un mundo nuevo y maravilloso. Las fuerzas, facultades y talentos ocultos cobran vida, y descubres que eres una persona mejor de lo que habías soñado ser.’’

‘’El secreto de la felicidad es simple: averigua que es lo que te gusta hacer y dirige todas tus energías en esa dirección. Si analizas a las personas más felices, saludables y satisfechas de tu mundo, verás que todas han encontrado cuál era su pasión y luego se han dedicado a perseguirla.’’


‘’Que este nuevo día sea el inicio de tu vida, el día en que tomas la decisión de concentrarte en lo más importante para ti. Toma la decisión de invertir más tiempo con quienes dan sentido a tu vida. Deléitate en el poder de esos momentos especiales. Haz las cosas que siempre has querido hacer. Deja de posponer tu felicidad a expensas de la realización.’’

miércoles, 19 de marzo de 2014

Primera vuelta del temario. ¿Cómo estudio?

¡Hola a todos de nuevo! ¿qué tal lleváis las primeras semanas de estudio? Espero que os haya gustado mi primera entrada del blog. Hoy os voy a hablar de cómo he estudiado yo para el EIR en la primera vuelta (en mi caso de marzo a septiembre, aunque si empiezas en abril, por ejemplo, también valdría). Escribiré otra entrada para la segunda y la tercera vuelta cuando sea oportuno, de nada sirve que ahora os hable de la última cuando quedan 10 meses, se os olvidaría. Por supuesto es totalmente subjetivo, cada uno somos de una manera pero a mí me ha funcionado, así que por eso lo comparto con vosotros.

Cuando me dieron los primeros manuales lo primero que hice fue echarlos un ojo, curiosidad más que nada! Había oído hablar taaanto de ellos, que si estaban muy bien escritos, que si se entendían perfectamente, que si resumían lo que te tenías que saber sin meter paja… y así era a mi parecer. Es curioso porque me acuerdo como si fuera hoy cuando me puse por primera vez delante de los manuales para estudiarlos, resoplé y dije ‘’bueno, pues manos a la obra’’. ¿Os digo la verdad? No sabía ni por dónde empezar. Quería hacerlo bien, hacerlo bien desde el principio. Y tenía la sensación que con tantos meses por delante, se me iba a terminar olvidando todo (esta sensación la tienes hasta el mismo día del examen pero no os asustéis, es un sentimiento GENERALIZADO).

De marzo a septiembre estudié de la siguiente manera:

-Lo primero que hacía era una lectura más o menos rápida. A mí no me sirve empezar a subrayar o memorizar de primeras si no se a lo que me enfrento. Entonces, lo leía todo de una vez y con esto conseguía hacerme una idea general del tema. Me hacía una idea de lo que iba, su extensión, su dificultad.

-En segundo lugar hacía otra lectura, pero ya dirigida a comprender más, claramente esta me requería menor dificultad, en cada lectura nueva te vas quedando con algún concepto más. Y también me dedicaba a subrayar con fosforito SÓLO los títulos. Eso me entretenía y qué narices, me gustaba xD.

-La tercera vez que lo leía ya era para subrayar con boli. Yo soy de las que subraya todo. Sí, soy consciente de que hay que subrayar conceptos importantes solamente o eso es lo que siempre se ha dicho pero es que a nosotros nos comentaban que si estaba en el temario había que sabérselo así que en este caso todo me parecía importante :P. Ya sabéis como es el EIR, un examen tipo test en el que te pueden preguntar cualquier detalle sin importancia que no te esperas. Sino lo subrayaba tenía la sensación de que no me lo sabía (manías oye..). En este paso ya leía dos veces cada párrafo para quedarme con las ideas. Ya comenzaba a memorizar. Pero ojo siempre entendiendo. Si había alguna cosa que no me quedaba clara, me paraba, lo buscaba en google, en el foro… y lo apuntaba en una libretita que tenía a parte o simplemente si ya lo entendía, continuaba. Esto es importante, no dejéis nada colgando porque se acumulan dudas y puede ser la hecatombe.

-Cuando ya tenía el tema estudiado y tal, antes de la clase, hacía esquemas. Bien, aquí me voy a parar un poco más. Digo esquemas y no transcripciones enteras del manual. Eso os puede llevar mucho tiempo y estamos como para perderlo. Sé que hay gente, entre las que me incluyo, que nos gusta estudiar por nuestra letra pero enfermer@s, son 32 temas, es una oposición, en resumen, imposible. Pero lo que sí que os puede servir de grandísima ayuda son los esquemas. Hacedlos de lo que creáis transcendental y si veis que falta algo o que en la clase añaden alguna cosa rellenarlos. Los mejores esquemas son los que nos hacemos nosotros mismos, esto lo habréis escuchado mil veces pero es una verdad como un templo de grande. Es como mejor se te queda. Algunos profes te mandan las diapositivas de las clases pero, en realidad, no me sirvieron de mucho. Yo seguía el manual hoja por hoja para realizarlos, no mezclaba, porque así mientras estudiaba por el manual se me iban los ojos al esquema. Esto me fue de grandísima ayuda para la segunda vuelta.

Sólo hubo una clase en la que por circunstancias, no pude llevar el temario leído y estaba más perdida que un pulpo en un garaje. Si vais a la clase con el temario estudiado, todo lo que dirá el profe os lo sabréis o por lo menos os sonará la mayoría de cosas y si algo no habéis entendido os lo explicará. Y a parte de repasar y consolidar lo aprendido, saldréis con la satisfacción de que os lo sabéis y os iréis motivado a casa. 

Si lo estáis realizando a distancia o por vuestra cuenta y no disponéis de clase, lo mismo, poneros una disciplina, un límite de estudio de un tema (una semana es lo mejor a mi parecer), para así tener esa constancia.

Después de la clase, al día siguiente, o los dos días siguientes si era un tema jodidillo, me dedicaba a hacer el último repaso final del tema. Me gustaba dejarlo bien masticado para facilitar el estudio de la siguiente vuelta, en la que lo más importante será la memorización de todo de nuevo y que será más caótica porque se dispondrá de menos tiempo y porque por ejemplo en vez de dar Enfermería Maternal solamente que de por sí es un tema extenso se juntará con Enfermería Pediátrica. Hacía el test correspondiente del tema y ya pasaba al que tocase la semana siguiente.

De momento quedaros con que en la primera vuelta tenéis que comprender el tema, apuntando cifras y reteniendo conceptos importantes en los que el profesor incida sobre ellos. Por experiencia os digo que hay cosas que se os va a olvidar, lógicamente, pero no creáis que estudiáis en vano, no es lo mismo estudiarlo por primera vez en septiembre que repasarlo en septiembre, va a parecer que se os ha olvidado todo pero no, hacedme caso. Con esto os quiero decir que todo lo que tengáis avanzando en la primera vuelta será de gran ayuda, pero ojo sin agobios. Iros de vacaciones, esto es OBLIGATORIO, básico, primordial. Yo estaba ya saturadísima y me fui una semana a la playa y es lo mejor que pude hacer. Vine con las pilas cargadas. Salid con vuestros amigos, pareja, disfrutad de la familia, iros de compras, hacer deporte... en un año da tiempo para todo. Desconectad del estudio en definitiva, porque si no os volveréis locos y no llegaréis con fuerza al final. La cuestión es organizaros, es muy importante la organización para que dé tiempo a todo.

Conozco casos de gente que estudió solamente unas pocas horas en la primera vuelta y luego, quedo de las primeras. Y gente que lo compaginó trabajando e igual. ¿Cuántas horas empleé yo para el EIR en la primera vuelta? No os voy a mentir. Unas 8 de lunes a viernes. El sábado NUNCA estudiaba. El domingo por la mañana NUNCA estudiaba. El domingo por la tarde a veces. Y digo a veces porque si estaba muy machacada evidentemente no hacía nada, pero si había una semana de una asignatura más o menos fuerte sí que empollaba.

Y ahora es cuando me decís, y ¿yo tengo que estudiar tanto para sacarlo? Y mi contestación es, NO SE. Desconozco cómo eres tú, tus capacidades, no conozco tus distracciones, si estás una hora pero te pasas media en el whats up, si estás 10 pero te levantas cada cinco minutos. No podría nunca recomendar a nadie estudiar más o menos horas. Yo simplemente os cuento lo que he hecho, como han sido los pasos que me han llevado hasta donde estoy ahora.
Os pueden parecer mucho, os puede parecer una burrada, la verdad es que hasta mí ahora me lo parece. Pero no me arrepiento. Cuando reflexioné acerca de prepararme el examen era consciente de lo que iba a suponer mi vida durante un año y necesitaba estudiar tanto para de algún modo dominar el tema. Eso me daba seguridad. Sabía que era un examen en el que me iba a enfrentar con mucha gente y tenía que dar todo de mí.

Y hasta aquí la entrada de hoy. Preguntadme lo que queráis que yo os ayudaré si está en mi mano. Un beso a todos,


V


miércoles, 12 de marzo de 2014

¿Qué necesito para aprobar el EIR?

Estando en la carrera oí bastante la palabra EIR y ni siquiera conocía su significado, ¿examen? ¿otro más? ¿para ser especialista? ¡pa’matarme! (aunque tampoco la mayoría lo sabía lo cual te hace pensar que en las facultades hace falta más información de la especialidad, ¿no creéis?). Lo que ni por asomo me podía imaginar es lo que eso iba a suponer en mi vida próximamente… Terminé con la idea de trabajar (JA!) porque tenía más de 21 años y realmente quería (que no todo el mundo quiere ojo, los hay que prefieren tomarse un año sabático, aunque ahora mismo, nos lo hacen tomarlo si o si ;) Sabía que las cosas estaban mal lo que no sabía es que estaban TAN mal, curriculums y más curriculums con los que seguramente se limpiaron los mocos (por no decir otra cosa xD) pero yo no cesé, tenía que conseguir ver cumplido mi sueño: el trabajar de lo que me fascinaba, la enfermería.

Finalmente pude trabajar para una gran empresa con la pequeña esperanza de que no fuese algo temporal, que me pudieran hacer un huequecito pero no se dio el caso (ays que inocente) así que ya casi llegando al examen me plantee qué hacer con mi vida. Sabía que por mucho que quisiera el trabajo estaba jodidamente mal por lo que opté por estudiar por mi cuenta el EIR para ‘’probar’’, para ver que tal era el examen ese del que todo el mundo hablaba y del que mucha gente se refugiaba dadas las circunstancias.

La idea era que fuera mi pequeño trampolín para prepararme con esmero esta convocatoria y todo cuanto planeé hace ya siglos (o al menos eso es lo que me parece que ha pasado a día de hoy xD) se ha cumplido. No lo saqué (como me esperaba) así que me decidí por estudiar y poner toda la carne en el asador J

Bien, uno se plantea hacer el examen EIR por varias circunstancias:

1) VOCACIÓN. ¿A cuánta gente conocéis que su mayor ilusión en la vida es ser MATRONA? porque yo a patadas!! Quien dice matrona dice pediatría, salud mental, etc. Quien tiene verdadera vocación tiene un graaaan paso ganado, pero OJO, no el más importante, y ¿por qué?. En mis propias carnes puedo decir que no la tengo, y aquí estoy J me explico y paso al punto dos…

2) TRABAJO. Mi caso. No tengo vocación por ser matrona la verdad, pero me he decidido por ella por varios motivos entre los que está que me parece preciosa y que espero terminar encantada (a día de hoy puedo decir que hubiera elegido sin problema otra cosa y el día que me den el título que fue la mejor elección de mi vida, eso no se puede saber hasta que no lo vives), mi vocación reside en ser enfermera (no se ha notado ¿no? :P) no hay otra cosa de la que esté más segura, peeero no se me ha permitido trabajar por lo que he tenido que recurrir a esta vía si no me quería marchar fuera. No es una cuestión de necesidad (que eso sería el punto tres x ejemplo ;) y que también puede perfectamente ser! Sino de sentirte útil en la sociedad, de no depender más de tus padres, de tener tu autonomía, tu sueldo, de llegar contenta a casa por haber cuidado y que alguien te haya dado las gracias después de una dura jornada, de aprender día a día de cada persona, de estar orgullosa de tu trabajo, son esas cosas, esos detalles de los que con 50 años me queje seguramente pero que ahora no puedo ansiar más.

He leído cientos de veces que enfermería era considerada la ‘’profesión sin paro’’, igualito que ahora… ¿pero cómo hemos llegado hasta aquí?.  Poco a poco están consiguiendo quitarnos la ilusión por la que decidimos realizar esta fabulosa carrera. Hace falta unirnos, defender nuestros intereses, y luchar por favor, luchar para hacer ver a la gente, a los políticos… que somos una pieza fundamental en el Sistema Sanitario, que esto no puede seguir así, que es una verdadera desgracia ver cómo somos de lo mejorcito del mundo y que nos hayan obligado a irnos… Sueño con que algún día esto de un verdadero giro porque si no será el fin…

En fin que me enervo, ya sea por vocación o por querer currar, decides dar el gran paso de ESTUDIAR EL EIR. Son tres palabras y parece fácil, ¿verdad? pues la verdad es que no, no lo es (podría deciros yujuuuuu ya he aprobado, estudiad vosotros también que total, seguro que aprobáis). Esta frase no saldría de mi boca jamás, porque yo he creado este blog entre otras cosas para animaros en el camino del EIR pero también para expresaros mi opinión con sinceridad, para deciros según mi punta de vista como son las cosas.

Si nunca has estudiado para una oposición sino simplemente para exámenes de la carrera, instituto… al principio comparas, todos sabemos cómo somos cada uno, y nuestro método de estudio, puntos débiles… ¡ERROR!. No tiene nada que ver. Hay gente que en la carrera le bastaba estudiando una semana antes y sacaba matrículas (no era mi caso, snif) otros estudiábamos poquito a poquito (entre clases, prácticas y vida social ¡claro!) y sabías, dabas por hecho que ibas aprobar, ¿por qué? porque estudiabas, ¿vale entonces en el EIR la famosa frase ‘’si estudias, apruebas’’?. NO. Este es el gran problema creo yo. En este examen no basta con estudiar y ya, no puedo decir bueno me voy a matar a empollar y voy a sacar la plaza porque desgraciadamente puede que no (ojalá fuera así de sencillo). Diréis pues vaya ánimos, NO, quiero ser clara como el agua, pero no os preocupéis porque os voy a terminar convenciendo, veréis ;)

También deciros que aunque no es lo único es el pilar más importante eso sí. ¿Cuántas veces habéis escuchado que sin estudiar han aprobado el examen? MENTIRA. Pongo la mano en el fuego de que no es verdad. Lo que pasa que hay gente que no reconoce que no estudia, no entenderé nunca porque pero bueno. Yo lo reconozco, ¡he dado TODO de mi para este examen y no se me caen los anillos!.

Al no haber un temario oficial puedes decir, estudio por los apuntes de la carrera, me compro yo libros y lo hago por mi cuenta, lo intento por academia... Bien, esa es la gran duda que tiene mucha gente y aunque cada uno es libre de decidir, of course, os diré como lo he hecho yo y como os aconsejo, por tanto: ACADEMIA. Y no vale cualquiera, he podido ver por amigas, conocidas, opiniones… que las hay malas de narices pero eso si careras que da gusto, para ello hay que informarse muy bien y buscar opiniones, porque si el 90% de la gente está descontenta, pues hombre algún fallo tendrá ¿no? a mí me da igual dar publicidad porque realmente he estado agusto y no me importa decirlo, yo me he preparado con IFSES. Está claro que el 90% es lo que tú hagas, porque por mucha academia si no estudias lo que deberías… no sirve de na. Pero a mí me ha servido para varias cosas:

El ser constante, super super importante en el EIR, ¡la CONSTANCIA! Cada día es un pasito en el camino, no vale de absolutamente nada las panzadas, ¡os lo digo yo!. Y me ha ayudado porque cada semana teníamos un tema, y yo me centraba esa semana en ESE tema, y sabía que tal día tenia clase presencial y me ‘’presionaba’’ el hecho de tenerlo estudiado para esa clase. No me quiero enrollar mucho aquí porque quiero hacer una entrada de como he estudiado, así que continúo.

Hacer test. Y no test cualquiera no, al tun tun y ya está, sino test de cada tema, SI, BASTANTES DE CADA TEMA, entendiendo la respuesta, buscando la trampa, preguntando si dudas en la respuesta. Así se hace una pregunta test. No decir, uy la he fallado y pasar a la siguiente sino entender el PORQUE. Ays, estoy segura si yo no me hubiera tirado tantas horas con los dichosos test no hubiera ni aprobado, me parece vital vital. Yo he tenido la suerte de contar con test a patadas, del curso de marzo a septiembre y del intensivo (de hecho en el tercer repaso solo los ojee rápido porque no me daba tiempo a volverlos a hacer de tantos que eran).

Hacer simulacros. Pero no simulacros cualquiera, NO NO, simulacros presenciales. Ese es mi consejo ¡Y ME HA FUNCIONADO!. Para ponerte en situación de examen lo primero (no ha habido ninguno en el que no estuviera nerviosa) y el poder corregirlos después, en eso chapó a Ana Rincón, supongo que ya todas la conoceréis, es una auténtica CRACK. Qué curioso fue hacer el EIR y ver que había muchísimas preguntas que Ana había intuido que iban a caer, si si tal cual (solo quien haya pasado por IFSES me entenderá). Desconozco si el resto de academias tiene simulacros tan buenos como esta, ¡pero creo que no eh xD!. Recuerdo que en los primeros me dolía la cabeza de leer tantas preguntas y se me terminaba nublando la vista pero en cambio en el examen no me cansé, ¿por qué? porque estaba muy entrenada. Ya había hecho muchos, ya sabía a lo que me enfrentaba. No puedes pretender correr una maratón al segundo día de empezar a correr…

Bien, y termino con lo más importante de todo. Peeeero, ¿no nos habías dicho que lo más importante era estudiar? SIIIII pero al igual que una casa no se construye sin ganas no te puedes enfrentar al EIR sin MOTIVACIÓN. Puedes estudiar miles de horas pero como no estés motivado no haces nada. En este sentido, yo andaba de motivación más que de sobra y es una suerte!. Aunque eso no quita para que tuviera mis momentos de bajón por supuesto, es un camino muy largo. Pero os aconsejo que el día más perro, ese en el que estés harta, te duela la cabeza, pienses que no puedes más o que no vas a conseguir nada… te tumbes en la cama, relajada, cierres los ojos, respires hondo y pienses un momento el motivo por el que has decidido emprender esto. BUSCALE el verdadero sentido. PIENSA que mientras estés mal habrás retrocedido un pasito, y que TÚ puedes más que todas las cosas, que TÚ tienes el poder y que TÚ lo vas a conseguir SI O SI. Recuerda lo mucho que vales, que al igual que celebraste con emoción en la graduación que ya eras enfermera vas a celebrar esto también. Que no es nada FÁCIL, nadie dice que lo es, pero precisamente al no serlo la recompensa será inmensa. Es así. Es muy importante estar motivado y cogerlo con ganas porque si de por sí al principio cuesta coger la rutina de sentarte día y tarde cada día, cuando lleves dos, tres meses será mortal. BUSCA un motivo para ser feliz mientras estudias. Uy, pues he conseguido entender toda esta página la cual parecía que estaba en chino, bien! he estudiado todo lo que pretendía para hoy, guay! he estado super atenta toda la clase… pequeños detalles que te hagan sacar una sonrisa y que hagan que todo sea más llevadero.

Teniendo en cuenta todo lo que os he dicho + ilusión y + ganas reales de aprender posiblemente en febrero del año que viene cuando metas tu DNI en la página del ministerio pegues un grito de alegría y vayas corriendo a los tuyos para contarles que estás dentro. Yo por lo menos así lo hice y aquí estoy… aprovechando las vacaciones y cargando las pilas a tope para enfrentarme a estos dos años de residencia J

Bueno, espero que os haya gustado mi primera entrada. Por favor si tenéis alguna duda, opinión, tanto a favor como en contra, ¡¡escribid!! no os lo guardéis para vosotros. Me gustaría que hubiera interacción J

Próxima entrada. ¿Cómo…cuántas horas…de qué manera… estudio el EIR?.

Saludos.


V

domingo, 9 de marzo de 2014

Mi pequeño rincón

Bienvenidos a tod@s a mi blog,

Me presento :D Enfermera de profesión, acabé en 2012 (¡última promoción de diplomados!) y aunque trabajé dos meses al terminar, actualmente estoy en paro (como la mayoría de nosotras, no es novedad) y añadir una cosa, un pequeño detalle sobre el que se centra la idea de crear este espacio, en mayo seré residente de... ¿matrona? espero, ¿en mi ciudad? espero, y con unas ganas locas por aprender y trabajar de nuevo de la profesión más bonita del mundo (y conocer dicho sea de paso el mundo de la especialidad de matrona). Hace un par de días decidí crear este rincón porque me apetecía compartir mis pensamientos/sentimientos acerca de nuestra profesión y aquí estoy,  no hay vuelta atrás, dispuesta a hablar de mi camino hasta aquí, de mi futuro paso de Residente1 y motivar a todos los que estéis con el EIR. Espero que os sea de utilidad o que por lo menos os entretenga. No será por ilusión y ganas, ¡yo tengo muchas! como con todas las cosas que me pronpongo y empiezo ( adelanto :)

V